Los Atributos de Dios con Invitación

Voy a hablar con usted acerca de Dios. Dios siempre ha existido. No tuvo padre ni madre. No nacía, ni puede morir. Ha existido antes que cualquier otra cosa existiera. El sabe cómo fue hecho todo, y sabe hacerlo todo.

El hizo el sol, la luna, e hizo todas las cosas que están en el universo. El sabe lo que nosotros estamos pensando; sabe cuando nosotros nacimos y sabe cuando nosotros morimos. El vive en la gloria y nosotros no podemos verlo. El nunco durmía con mujer; nunca tuvo esposa. Nunca tuvo hermanos ni hermanas, pero tuvo un Hijo. Su nombre es Jesús. Dios nunca duerme. Puede ver durante la noche, puede ver al armadillo en su cueva, puede ver al pez en el río. Dios es poderoso y tiene mas poder que cualquier cosa o cualquiera otro en el mundo. Tiene mas fuerza que el río.

El lo escucha todo. El puede escuchar la serpiente mientras está enredándose en la selva. Puede escuchar la hormiga mientras está haciendo su casa. El puede escuchar la mariposa mientras vuela, y lo que un hombre dice en voz baja. Dios es bueno. Nunca ha pecado. Dios odia el pecado. Pero, Dios ama a los indígenas, al pobre, al rico, a todos. Los Mexicanos en su idioma llaman a Dios, "Dios."

Pero Dios no quiere que ninguna persona ame el pecado. El dice que debe de haber juicio por el pecado, pero El ama a la gente. El quiere que todos esten gozosos y contentos y los llevará al buen lugar cuando mueran. Pero no dejará entrar al pecado a ese lugar. Pero el que peca, irá a otro lugar donde se encuentran los malos. Allá solamente hay tristeza y dolor. Pero Dios no quiere que nadie sufra. Por eso envía a su Hijo para nuestra ayuda.

Jesús nunca pecó. El vivía en la tierra entre los humanos. Nunca hizo nada malo. Siempre fue bueno. El nos amó tanto que estuvo dispuesto a recibir nuestras culpas por el pecado. El dio su vida por nosotros. El hizo el pago por nuestros pecados y se levantó otra vez. El ahora está en la gloria. Dios solamente nos acepta por medio de Jesús. Tenemos que creer en Jesús y seguirle. Dios nos aceptará y nos perdonará. Cuando nosotros muramos, Jesús nos llevará a Su lugar de descanso. Allá no hay llanto, no hay hambre, y todo es gozo. Sigamos a Jesús. Dejemos nuestros malos caminos.