unfoldingWord 21 - Dios promete el Mesías
Raamwerk: _Una historia de la Biblia en: Génesis 3:15; 12:1-3; Deuteronomio 18:15; 2 Samuel 7; Jeremías 31; Isaías 59:16; Daniel 7; Malaquías 4:5; Isaías 7:14; Miqueas 5:2; Isaías 9:1-7; 35:3-5; 61; 53; Salmos 22:18; 35:19; 69:4; 41:9; Zacarías 11:12-13; Isaías 50:6; Salmos 16:10-11_
Skripnommer: 1221
Taal: Spanish
Gehoor: General
Doel: Evangelism; Teaching
Kenmerke: Bible Stories; Paraphrase Scripture
Status: Approved
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Skripteks
Desde muy al principio, Dios planeó enviar al Mesias. La primera promesa del Mesías fue dada a Adán y Eva. Dios prometió que nacería un descendiente de Eva que aplastaría la cabeza de la serpiente. La serpiente que engañó a Eva era Satanás. La promesa significaba que el Mesías que vendría derrotaría completamente a Satanás.
Dios le prometió a Abraham que a través de él todas las naciones del mundo recibirían bendición. Esta bendición se cumpliría cuando el Mesías viniera en algun momento en el futuro. El haría posible que cualquier persona de toda nación en el mundo fuera salva.
Dios prometió a Moisés que en el futuro levantaría otro profeta como Moisés. Esta era otra promesa acerca de ese Mesías que había de venir más adelante.
Dios prometió al rey David que uno de sus descendientes reinaría sobre el pueblo de Dios para siempre. Eso significaba que el Mesías sería uno de los descendientes de David.
Por medio del profeta Jeremías, Dios prometió que establecería un Nuevo Pacto, pero no como el Pacto que Dios había hecho con Israel en Sinaí. En el Nuevo Pacto Dios escribiría Su ley en los corazones de la gente, la gente conocería a Dios personalmente, ellos serían Su pueblo, y Dios perdonaría sus pecados. El Mesías comenzaría ese Nuevo Pacto.
Los profetas de Dios también dijeron que el Mesías sería profeta, sacerdote y rey. Un profeta es una persona que oye las palabras de Dios y proclama esas palabras de Dios a las personas. El Mesías que Dios había pormetido enviar sería el profeta perfecto.
Los sacerdotes israelitas hacían sacrificios a Dios en nombre de las personas como sustitución por el castigo de sus pecados. Los sacerdotes tambien oraban a Dios por las personas. El Mesías sería el perfecto sumo sacerdote que se ofrecería a sí mismo como perfecto sacrificio a Dios.
Un rey es alguien que gobierna sobre un reino y juzga a las personas. El Mesías sería un rey perfecto que se sentaría en el trono de su antecesor David. Él reinará sobre todo el mundo para siempre, y juzgará siempre honestamente y tomará en todo momento las decisiones correctas.
Los profetas predijeron otras muchas cosas acerca del Mesías. El profeta Malaquías predijo que un gran profeta vendría antes de la llegada del Mesías. El profeta Isaías profetizó que el Mesías nacería de una virgen. El profeta Miqueas dijo que nacería en la ciudad de Belén.
El profeta Isaías dijo que el Mesías viviría en Galilea, que consolaría los corazones quebrantados de la gente, que proclamaría la libertad a los cautivos y daría liberación a los prisioneros. También predijo que el Mesías sanaría las enfermedades de la gente, y a los que no podía oír, ver, hablar, o andar.
El profeta Isaías también profetizó que el Mesías sería odiado sin razón y rechazado. Otros porfetas predijeron que la gente que mataría al Mesías sortearía sus vestidos y que un amigo le traicionaría. El profeta Zacarías predijo que al amigo le pagarían treinta monedas de plata como pago por traicionar al Mesías.
Los profetas tambien dijeron que el Mesías moriría. Isaás profetizo que la gente escupiría, se burlaría y golpearía al Mesías. Luego le herirían y moriría con gran sufirmiento y agonia, a pesar de no haber hecho nada malo.
Los profetas también dijeron que el Mesías sería perfecto, sin pecado. Moriría para recibir el castido por los pecados de todas las personas. Su castigo traería la paz entre Dios y las personas. Por esta razón fue voluntad de Dios que el Mesías fuera molido, machacado.
Los profetas predijeron que el Mesías moriría y que Dios también le levantaría de la muerte. Por medio de la muerte y resurrección del Mesías, Dios compluría su plan para salvar a los pecadores y comenzar el Nuevo Pacto.
Dios reveló a los profetas muchas cosas acerca del Mesías, pero el Mesías no vino durante el tiempo de ninguno de esos profetas. Mas de 400 años después de que fuera hecha la última de esas profecías, exactamente en el tiempo adecuado, Dios envió el Mesías al mundo.